Inflexiones

Atardece

Atardece

Nadie parece cansado, pero en el descampado ningún animalillo prefiere esperar. Queda poca luz. Ha sido un día de verano, largo y caluroso. Pronto caerá la noche y se hará notar con el fulgor de las estrellas, con la claridad de la luna. Y la sinfonía se apagará, tan dulcemente, como el sol cuando cae detrás de las montañas. Adiós, adiós con calma, con afecto, como se despiden dos viejos amigos. La mejor despedida es la que augura un nuevo encuentro. Esa es la nuestra. Mañana será otro día.

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