Había un niño que no dejaba de preguntar a su maestro cuándo podría tocar el piano. Un día su mentor le dijo: piénsalo bien, aprender a tocar el piano es una disciplina muy difícil. Necesitarás la mitad de tu vida para dominarlo. y la otra mitad para poder hacerte con uno. Apenas tendrás dinero para comer. El niño se fue a casa y pensó toda la noche. Al día siguiente, volvió e insistió en que quería tocar el piano. Entonces el maestro le dijo, ahora sí serás capaz de tocar el piano mejor que nadie.